sábado, 19 de mayo de 2012

USA el que manejò los hijos en Chile


La moneda arde

Obama se despide de Chile sin disculparse por el golpe de Estado 
Fue una visita relámpago que muchos chilenos creyeron que Obama aprovecharía para hacer un gesto esperado por más de 30 años: Asumir la responsabilidad de la CIA y presentar disculpas por el golpe de Estado de 1973. El mandatario, que está al tanto de cómo la Casa Blanca manipuló a Pinochet para derrocar al expresidente Salvador Allende, prefirió pasar página.


Pedir disculpas por Nixon


Todo empezó hace dos días, cuando cientos de estudiantes, ecologistas, sindicalistas y activistas antiglobalización se manifestaron en el centro histórico de Santiago de Chile para que Barack Obama saldara una vieja cuenta con el pasado y aceptara el papel de EE UU en el golpe de Estado de 1973 que trajo 17 años de férrea dictadura.
Era un mea culpa tardío del 44 º presidente de los EE UU, ante la imposibilidad de que el real artífice del golpe de Estado, Richard Nixon, muerto de un derrame cerebral en 1994, asumiera su responsabilidad con remordimiento.
Nixon, que sobrevivió a Allende y se alejó del poder luego de dimitir tras el escándalo Watergate, jamás escribió una sola línea en que prestara sus condolencias por las 3.000 víctimas del régimen pinochetista.


Obama no se disculpa con Dilma Rousseff


Chile estaba en su agenda de viaje. Tenía que conversar con Sebastián Piñera sobre la instalación de centrales nucleares en el país andino. Sin embargo previamente se entrevistó con Dilma Rousseff en Brasil. Como se sabe, la actual mandataria en sus años de juventud también fue torturada por militares entrenados por la CIA y la prensa en ningún momento vio a Obama presentar sus excusas hacia la exguerrillera que combatió la dictadura en los años 70. ¿Chile sería una excepción?

Mea culpa dentro del mismo Palacio de la Moneda

Según fuentes del diario chileno La Tercera, que siguió paso a paso la visita del presidente Obama, Sebastián Piñera junto a la primera dama, Cecilia Morel, dieron la bienvenida a la familia presidencial en el Palacio de la Moneda alrededor de las 14:03 horas de ayer lunes
Habría sido todo un acontecimiento porque desde el golpe de Estado contra el expresidente Allende, orquestado por el servicio de inteligencia americano, jamás se había planteado el siguiente escenario: El hombre fuerte de la Casa Blanca excusándose en el mismo lugar del crimen, delante de sus hijas y la Primera Dama.
Es decir, un mea culpa dentro el mismo Palacio de la Moneda que fue bombardeado por aviones militares y desde donde el presidente Allende, al verse solo y acorralado, se voló la cabeza con un disparo en la cabeza.
Pero era una posibilidad remota, que en ningún momento fue requerida por el actual presidente Sebastián Piñera ni por ninguno de su partido de Gobierno. Si Obama iba a disculparse, sería a pedido de la izquierda comunista de Guillermo Teillier.


La carta dirigida por los comunistas


Desde antes de la llegada de Obama, el diario La Tercera estuvo en la manifestación de este pasado domingo 20 de marzo, Guillermo Teillier del Partido Comunista afirmó que intentaría entregarle una carta a Obama en la que exigía que EE UU pidiera excusas por el papel crucial de la CIA en la caída de la Unidad Popular. Esta coalición llegó al poder de forma democrática en 1970 y nacionalizó el cobre en Chile sin querer indemnizar a las multinacionales estadounidenses.
Fue en medio de esa tormenta social de 1973 que EEUU vio oportuno intervenir por defender sus intereses o por miedo a una cubanización de Chile.
Quiénes más pedían ese mea culpa
  1. Las 300 personas que salieron a manifestarse el lunes a las 16:00 horas llamando a Obama "títere de Wall Street" y "fascista", rumbo al Palacio de la Moneda. Llamó la atención la presencia de un protestante que llevaba un cartel que decía "Prefiero a Gadafi". Finalmente, fueron detenidas 12 personas. Según informa la página de noticias Cooperativa.cl, la protesta no había sido autorizada.
  2. Alejandro Navarro, senador del partido Movimiento Amplio Social (MAS) no sólo creyó oportuno que Obama pidiera perdón; sino que hizo un llamado para que todos se acercaran al parque Almagro a manifestarse en contra de una persona non grata para Chile.

El pragmatismo de Obama


Tal como lo señala el diario El País y contrastando la información con La Tercera, Obama no insinuó en ningún momento un mea culpa en su Discurso de las Américas.
Sólo confirmó que las relaciones entre América Latina y EEUU habían sido extremadamente difíciles; pero que era el momento de no dejarse atrapar por el pasado. Aun cuando se entrevistó con Eduardo Frei, cuyo padre, parece ser, fue envenenado por agentes de Augusto Pinochet, su actitud no cambió. Solo prometió que pondría de su parte para que se esclarecieran los hechos y se revelara el misterio de su muerte.
Había que pensar en el futuro como lo hizo con Dilma Rousseff. Todo fríamente calculado al punto que ningún periodista de la prensa nacional se atrevió a sacar el tema. Más bien todos aplaudieron a Obama cuando Piñera sostuvo que EEUU era el imperio de los derechos humanos.
Le quedaban pocas horas al mandatario dentro de Chile antes de partir a El Salvador hoy martes por la mañana. Allí visitará la tumba del monseñor Romero, asesinado por los paramilitares. Que no esperen las víctimas un mea culpa.



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