El primer monumento a Francisco Bolognesi
Luis Gálvez, iniciador del proyecto |
El proyecto para
construir un monumento a Francisco Bolognesi se escuchó con fuerza entre la
juventud de Lima. La iniciativa nació de un grupo de colegiales limeños. El 30
de enero de 1898 se formó una comisión conformada por colegiales a iniciativa
del joven Luis Gálvez. El 17 de junio de 1899 se cambió el nombre de la
“Asamblea Escolar” por “Asamblea Patriótica Bolognesi”.
La colecta para realizar este monumento fue
llevada a cabo por la Liga de Defensa Nacional. Esta asociación logró recolectar
una gran cantidad de donativos.
El 3 de noviembre de 1899
el Congreso autorizó por ley la construcción del monumento encargando su
ejecución a Concejo Provincial de Lima.
El 1 de marzo de 1901 el Estado cede al
municipio de Lima un área de terreno para la construcción del monumento. Este
sería el origen de la plaza Bolognesi, espacio que uniría las avenidas Piérola o
Magdalena (hoy avenida Brasil, el paseo Colón, la avenida Alfonso Ugarte y la
avenida Breña (hoy avenida Arica).
El Alcalde de Lima Dr. Federico Elguera se hizo
cargo de la ejecución de la obra, donde incluyó para esta tarea a la comisión de
la “Asamblea Escolar” llamada desde entonces “Asamblea Patriótica Bolognesi” que
era presidida por el Dr. José Vicente Oyague i Soyer.
Agustín Querol |
José Vicente Oyague i Soyer |
El 22 de mayo de 1901 se
convocó al concurso para diseñar el monumento. Se presentaron 153 proyectos
donde participaron artistas españoles, franceses e italianos.
El 31 de marzo de 1902 fue elegido ganador, el
proyecto del escultor español Agustín Querol (1860-1909) quién había realizado
esculturas publicas en España, Cuba, Argentina y Filipinas.
Este monumento fue construido con un costo de
130 mil soles. Fue fundido en los talleres de Artística Marriera y Campiens de
Barcelona. Querol recibió ciento cincuenta mil francos, el resto fue utilizado
para levantar el monumento.
La primera piedra de este monumento fue
colocada el 29 de julio de 1902 con la asistencia del Presidente de la
República, los ministros de Estado, delegaciones diplomáticas y miles de
ciudadanos. Para esta ocasión se acuñaron unas medallas conmemorativas que
muestran el monumento que iba a ser erigido.
Medalla conmemorativa de la colocación de la primera piedra del monumento a Bolognesi. |
El 20 de
noviembre de 1903 se autorizó la entrega de tres mil libras para concluir los
trabajos de construcción del monumento.
En 1903 la primera parte del monumento a
Bolognesi llegó al Callao en el vapor Denderah de la compañía alemana
Kosmos.
Construcción del pedestal de la escultura. |
La construcción de la base
del monumento estuvo a cargo del arquitecto Maximiliano Doig y el ingeniero
Enrique E. Silgado como supervisor del proyecto.
El monumento fue inaugurado el 5 de noviembre
de 1905 en medio de una multitud. Todo el Paseo Colón y sus edificios fueron
adornados con banderas, luces eléctricas y guirnaldas y tuvo la asistencia del
héroe argentino de Arica, el general Roque Saenz Peña.
Inauguración del monumento (1905) |
El significado del
monumento
El monumento representa a Francisco Bolognesi
cuando es herido de muerte, aferrándose a la bandera. A un lado se acerca la
victoria alada con las coronas de laurel. En la base del monumento vemos Alfonso
Ugarte y su caballo luego de la caída desde el morro de Arica.
Al otro lado se observa a los defensores del
morro durante la batalla de Arica.
En la base se encuentran unos frisos donde se
ve a Bolognesi dar la respuesta a los chilenos y la Batalla de Arica. En la
parte posterior la patria representada como mujer llora a los héroes caídos en
la batalla.
En la parte frontal se encuentra la alegoría de
la fama, es una dama con los ojos vendados a punto de remontar vuelo.
Agustín Querol realizó este tipo de escultura
compuesta de conjuntos alegóricos alrededor de un pedestal, lo podemos ver en
proyectos suyos realizados en otros países.
Su obra se caracterizó por una gran formación
académica, exageradamente recargada y voluptuoso con superficies que atrapaban
las luces y sombras bajo efectos ópticos.
Críticas al monumento
La escultura causó polémica desde su
inauguración en 1905. Las críticas más duras fueron lanzadas por Manuel González
Prada, quién vio en este monumento “un artículo de exportación ultramarina.”
una escultura que desmerecía al héroe y lo caricaturizaba.
“A más de recargada y oscura en el
simbolismo, la obra carece de esbeltez y gracia”
“La columna achaparrada y tosca parece un
gigante a medio surgir de la tierra. Con su capitel charro, denuncia la pesadez
sin la fuerza, el recargo sin la suntuosidad, algo así como la obesidad anémica,
en el lujo harapiento y guiñaposo”.
“El exceso de la ornamentación no prueba
fecundidad en el artista, como la verbosidad y el floreo no dicen elocuencia en
el escritor”.
González Prada concluye su crítica a la obra de
Querol con el siguiente párrafo.
“Bolognesi aparece cogiendo un revólver y
asiéndose al asta de una bandera, como pudo figurar tocando un tambor o soplando
una corneta. Históricamente, es falso el asido a la bandera; simbólicamente,
raya en lo vulgar y sólo cuadraría en las imágenes de Epinal o en los compendios
de instrucción cívica. El escudo patrio, con su llama, su árbol de la quina y su
cuerno de la abundancia, habrían simbolizado mejor al Perú; así que debemos
estar agradecidos al artista por no haber puesto, en lugar de la bandera, un
broquel donde figurara un espécimen de los tres reinos -animal, vegetal y
mineral. La actitud de Bolognesi no expresa la resignación viril del militar que
voluntariamente ofrenda su vida, sino la mansedumbre pasiva, la conformidad
ovejuna. En vez del jefe herido y próximo a caer para no levantarse más, vemos
al soldado que en día de francachela empuña el revólver del coronel, atrapa la
bandera del batallón y va tambaleándose hasta rodar en tierra para dormir la
crápula. Le vemos cómico y trágico, pues antes de ir al suelo, puede arrojar un
tiro a cierta mujer que le brinda la imprescindible corona de laurel. ¡Infeliz
Bolognesi! El plomo chileno le quitó la vida, el bronce queroliano le pone en
irrisión.” (Horas de lucha. 1908)
En 1905, también se lamentó que el escultor no
estuviera presente en la ceremonia de inauguración. Al observar el gran
monumento, el más grande para su época, los limeños deseaban conocer al gran
escultor.
“¿Dónde está el Hércules que levanta
pensamientos de piedra, que no cumple su promesa –oficialmente formulada de
asistir a la apoteosis? ¿Dónde está el héroe de la obra que no se destaca ante
la admiración nuestra, -como figura de primer termino,- junto con a la obra del
héroe? ¡No ha venido Agustín Querol! (Actualidades, noviembre
1905)
Francisco Bolognesi por Agustín Querol. Foto: http://lapalomacoja.blogspot.com/2008/05/de-la-plaza-bolognesi-al-real-felipe.html |
La escultura de Bolognesi que coronaba el
monumento permaneció en este lugar hasta que fue cambiada en 1954 por otra
escultura elaborada por el gran escultor nacional Artemio Ocaña. La escultura
que motiva esta nota se encuentra actualmente en el Museo del Real Felipe del
Callao.
Pero esa es otra historia, del conjunto
escultórico original han quedado el resto de las figuras que han sido
vandalizadas en los últimos años y maltratadas por el pintado y el robo de las
partes de bronce.
FUENTES
PACHECO IBARRA, Juan José. La escultura
pública en Lima. (1900-1950) En: prensa.
1 comentario:
Si estuviera en 1905: Que ridículo su comentario señor González Prada, me avergüenza que un disque "culto peruano" opine como su propia critica lo describe: "llena de floreo populista".
...Han pasado muchos años y por mi parte veo una majestuosa obra que no tiene comparativa con la del Señor Ocaña, que lastimosamente es simple y muy poca de riqueza artística. Debería reponerse para embellecer la ciudad e historia del Perú.
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